Según la Organización Internacional del Café el 63% de la población española se activa al despertar con una taza. Pero ese momento cotidiano y revitalizante para la mayoría conlleva el trabajo de muchas personas que viven de esta industria. Los mayores productores cafeteros se sitúan en áreas de países en desarrollo, como Colombia o Brasil. Pero el producto es mucho más que el grano. Una ingente cantidad de residuos se genera cada año desde que se siembra hasta que llega en formato líquido al desayuno.

Este estudio demuestra cómo dar valor a los residuos del café mediante un método más rápido y eficiente

En estos países, los residuos y subproductos del café constituyen una fuente de grave contaminación y problemas ambientales, pero al mismo tiempo, pueden ser una fuente económica complementaria. En la actualidad, estos desechos son utilizados con múltiples funciones, como por ejemplo en el cultivo de hongos, la producción de bioetanol o como compostaje. Pero en las últimas décadas, el interés por la recuperación de compuestos de residuos agrícolas se orienta, en gran medida, para su aplicación en alimentos funcionales y productos cosméticos y farmacéuticos.

Así, los compuestos con mayor interés para la industria son los polifenoles y los alcaloides, por sus características antioxidantes y antimicrobianas. Uno de los principales problemas para la extracción de estas sustancias es la necesidad de utilizar disolventes que no sean tóxicos para el consumo, lo que encarece el proceso y hace que no sea rentable la reutilización de los residuos.

Extracto final conteniendo los compuestos bioactivos después de centrifugar.

Por ese motivo, un equipo de investigación de la Universidad de Córdoba ha publicado un artículo en la revista Separation and Purification Technology en la que demuestran cómo dar valor a los residuos del café mediante un método más rápido y eficiente en la obtención de sustancias que potencian los beneficios antioxidantes de alimentos y productos farmacéuticos aplicando los llamados disolventes ‘verdes’, supramoleculares o SUPRAS.

El término supramolecular fue acuñado por este equipo de investigación y hoy día es usado por toda la comunidad científica. “También son conocidos como disolventes ‘verdes’ o ‘inteligentes’ ya que, además, tienen la capacidad de modificarse en presencia de un estímulo externo, como puede ser la temperatura o la adición de sales, y volver a su estado natural una vez que recupera sus características iniciales. Esto permite que sean muy funcionales y versátiles”, indica a la Fundación Descubre la investigadora de la Universidad de Córdoba Ana Ballesteros, autora del artículo.

La investigadora de la Universidad de Córdoba Ana Ballesteros, autora del artículo.

Según la propuesta de este estudio, a través de la extracción con SUPRAS, se logra un método económico y simple con el que los compuestos bioactivos, aquellos que benefician al organismo, quedan separados y dispuestos para su uso. Al mismo tiempo, se da valor a los residuos del café al no requerir una gran inversión para la obtención de las sustancias beneficiosas que producen, lo que potenciaría la actividad de áreas productoras de café en países en desarrollo como Colombia.

Además, los extractos obtenidos mostraron capacidad antioxidante y efectos antimicrobianos idóneos para utilizarlos como suplementos en alimentación y cosmética. “La extracción con SUPRAS ofrece métodos rápidos, simples y de bajo costo y tienen un alto potencial para aplicarse directamente a la extracción de bioactivos de subproductos de la industria alimentaria, como es el caso del café”, añade la investigadora.

De esta manera, cuando mañana humee la taza de café entre las manos, habrá que pensar en los cafetales o en los hornos que tuestan el grano. Pero también podrán venir a nuestra mente en otros momentos, como al ir a la cama y aplicar una crema de noche revitalizante. Los laboratorios andaluces hacen posible que el café también pueda estar ahí.

Más información en #CienciaDirecta: Diseñan un método rápido que aplica disolventes ‘inteligentes’ para obtener antioxidantes de los residuos del café