Córdoba /
13 de enero de 2020

Los andalusíes reutilizaron la vía romana de Emérita para suministrar a Qurtuba, la capital del Califato

Fotografía ilustrativa de la noticia

Investigadores de la Universidad de Córdoba han constatado que la Cañada Real Soriana, antigua vía romana que unía Córdoba con Emérita Augusta, tenía una gran importancia en la época andalusí y medieval. La novedad de estetrabajo radica en el estudio de etapas posteriores a la romana y la aplicación de la fotogrametría, con la que han podido documentar e interpretar los cambios realizados en el trazado y firme de la vía.

Dos estudiantes de la Universidad de Córdoba han publicado un estudio que prueba la reutilización de aquella vía romana, convertida mucho después en Cañada Real Soriana, para llevar mercancías a Córdoba y controlar el territorio

José Luis Domínguez Checa y Miriam Gonzáles, estudiantes del Grado de Historia de la Universidad de Córdoba, han recogido en un artículo científico los resultados de un estudio fotogramétrico desarrollado en la Cañada Real Soriana, antigua vía romana que unía Córdoba con Emérita Augusta, y que evidencia la importancia que esta vía seguía teniendo en la época andalusí y medieval. Este estudio, realizado en el marco del proyecto Ager Mellariensis – Alto Guadiato y bajo tutela del investigador Antonio Monterroso Checa, ha sido publicado en la revista Antiqvitas.

Uno de los investigadores del estudio realizando pruebas de fotogrametría, con la que han podido documentar e interpretar los cambios realizados en el trazado y firme de la vía.

El equipo que forma parte de este proyecto de investigación había documentado esta vía en varios tramos del término municipal de Córdoba y Alto Guadiato. En este caso, la investigación llevada a cabo por los dos jóvenes investigadores tiene como novedad el estudio de etapas posteriores a la romana y la aplicación de la fotogrametría, con la que han podido documentar e interpretar los cambios realizados en el trazado y firme de la vía.

En la época andalusí, la Cañada Real Soriana seguía siendo un importante eje de comunicación para Córdoba, tanto con Badajoz y Mérida como con Toledo y por esta misma vía se articuló el control de estos territorios en época andalusí. Por ella, vinieron también los capiteles romanos de la ciudad de Mérida, que se reutilizaron en la mezquita Aljama. Después de esta gloriosa etapa, esta vía pasó a ser un eje fundamental de transhumancia en la época bajo medieval, de ahí que se la entienda, aún hoy, como Cañada Real Soriana o incluso como el “camino mozárabe”.

Hasta entonces, las etapas posteriores a la época romana no habían sido objeto de estudio en este caso. Las vías romanas suelen tener reutilizaciones a lo largo de la historia aunque el estudio de éstas suele centrarse en las reparaciones de puentes o construcción de nuevos tramos. En este caso, junto a ello, se ha atendido a algo que pasa normalmente inadvertido: las restauraciones de la infraestructura y el pavimento. Por ello, este artículo se centra en la documentación e interpretación de los cambios que se produjeron en el trazado y firme de la vía Córduba-Emerita en el entorno del Santuario de Linares en Córdoba. La adquisición fotogramétrica y la lectura estructural del firme de la vía y el puente de arroyo de Linares centran fundamentalmente el estudio. Se ha conseguido con ello documentar su rehabilitación en época medieval y sucesivas.

De este modo, la conexión histórica entre Córdoba, Lusitania y la Meseta, a través de su sierra y, en concreto, con el Muriano, abre unas posibilidades a la divulgación científica de este cauce de riqueza.


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