Almería /
06 de febrero de 2020

Minimizar la relevancia social del cuerpo para hacer frente a los trastornos alimentarios

Fotografía ilustrativa de la noticia

En un estudio publicado recientemente en la revista especializada de referencia ‘Body Image’, miembros del grupo de investigación ‘Contextos en el aprendizaje escolar en educación física y hábitos de salud’  de la Universidad de Almería proponen implementar campañas de comunicación y acciones educativas como vías de prevención en adolescentes.

En la actualidad, los trastornos de la conducta alimentaria suponen un problema de salud especialmente prevalente durante la adolescencia. Así lo dicen los resultados de diversos estudios epidemiológicos, que apuntan a que dichos trastornos afectan a un número creciente de adolescentes de ambos sexos.

Mujer entrenando a adolescentes en voleibol.

En este sentido, una de las principales líneas de trabajo desarrolladas por el grupo de investigación HUM-628 de la Universidad de Almería ‘Contextos en el aprendizaje escolar en educación física y hábitos de salud’ es precisamente el estudio de las causas que, relacionadas con la forma en la que la persona experimenta su cuerpo, es decir, la imagen corporal, podrían explicar la aparición de los trastornos de la conducta alimentaria. Sobre el origen de estos problemas en esa franja de edad, varios integrantes del grupo han publicado en la revista Body Image, de referencia internacional en este ámbito, un estudio de gran calado.

El trabajo se titula ‘Physical appearance comparisons and symptoms of disordered eating: The mediating role of social physique anxiety in Spanish adolescents’. En él, los investigadores de la Universidad de Almería aportan evidencias que apuntan a que los trastornos de la conducta alimentaria en la población de entre 12 y 17 años de edad podrían emerger a partir dos procesos diferenciados. De un lado, la tendencia a comparar atributos corporales como el peso, la talla, la silueta o incluso partes específicas del cuerpo con los de sus semejantes y, de otro lado, considerar que el propio cuerpo podría estar siendo negativamente evaluado por esos semejantes.

Investigadores del grupo de investigación ‘Contextos en el aprendizaje escolar en educación física y hábitos de salud’ de la Universidad de Almería.

En su conjunto, los resultados del estudio apuntan a que implementar estrategias encaminadas a minimizar la relevancia social del cuerpo podría contribuir a la prevención de la aparición de los trastornos de la conducta alimentaria entre los adolescentes de ambos sexos. Como aplicaciones prácticas que podrían derivarse de estos resultados, los investigadores de la Universidad de Almería proponen la puesta en marcha de campañas de comunicación y acciones educativas encaminadas en ambos casos a promover la aceptación de la diversidad corporal entre la población adolescente.


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