Temperatura o competencia, ¿qué influye más en las hormigas de Doñana?
Un equipo científico de la Estación Biológica de Doñana – CSIC ha estudiado las relaciones de competencia entre distintas comunidades de hormigas de la Reserva Biológica de Doñana analizando cómo las diferentes especies explotan su alimento, cuáles son sus patrones diarios de actividad, sus preferencias de temperatura, así como sus interacciones con otras especies en Doñana. La temperatura y la competencia son dos de los principales factores que influyen sobre las comunidades de hormigas.
Un equipo científico de la Estación Biológica de Doñana – CSIC ha estudiado las relaciones de competencia entre distintas comunidades de hormigas de Doñana analizando cómo las diferentes especies explotan su alimento, cuáles son sus patrones diarios de actividad, sus preferencias de temperatura, así como sus interacciones con otras especies en Doñana. La temperatura y la competencia son dos de los principales factores que influyen sobre las comunidades de hormigas. En el caso de la temperatura, cada especie tiene un rango en las que recolecta su alimento de la manera más eficiente. Sin embargo, la competencia con otras especies puede disminuir su eficiencia: las más dominantes pueden monopolizar estos recursos y limitar el acceso de otras especies al alimento.
El estudio ha tenido lugar en la Reserva Biológica de Doñana en tres tipos de hábitats diferentes: pinar, sabinar y matorral de monte blanco. Se han utilizado cebos para evaluar la competencia entre especies a nivel espacial y temporal en transectos determinados previamente. Posteriormente, se ha analizado el efecto de la temperatura sobre las cuatro especies más abundantes de cada hábitat.
Con estos datos, el equipo ha creado un Índice de Competencia Térmica (TCI) para evaluar en qué medida influye la temperatura y el dominio numérico de una especie en la probabilidad de tener éxito en las interacciones entre especies. Este índice TCI indica que el éxito de una especie en las interacciones -lo que supone que tenga o no que abandonar el cebo- depende de la proporción relativa de hormigas obreras de las dos especies competidoras y del efecto de la temperatura sobre cada especie. Por ejemplo, hay hormigas endémicas de Doñana, como la hormiga florícola (Cataglyphis floricola) o la hormiga tartésica (Cataglyphis tartessica) capaces de recolectar alimento con temperaturas del suelo de más de 50ºC, cuando ya no hay otras hormigas competidoras.
En definitiva, este estudio confirma que las relaciones competitivas en estas comunidades de hormigas mediterráneas dependen del hábitat y son fuertemente influidas por la temperatura.
Referencia bibliográfica:
Daniel Sánchez-García, Xim Cerdá, Elena Angulo. Temperature or competition: Which has more influence on Mediterranean ant communities?. Plos One. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0267547
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