Avances científicos que ayudan a mejorar el rendimiento de futbolistas en el terreno de jugo
Fuente: Universidad de Almería
Investigadores de la Universidad de Almería han publicado un nuevo estudio sobre el perfil de sprint y aceleración de jugadores profesionales en competición. Se trata de un estudio de corte longitudinal tras la recogida de datos que se llevó a cabo durante la temporada 2018/2019 en partidos oficiales de LaLiga 123. Los deportistas fueron monitorizados con el dispositivo WIMU Pro (desarrollado por la empresa almeriense RealTrackSystems) con el fin de recoger datos de cada aceleración y sprint.
La Universidad de Almería ha llevado a cabo un estudio que va a permitir ayudar a los preparadores físicos de los futbolistas profesionales a mejorar su rendimiento en el terreno de jugo, tras analizar datos sobre la aceleración y el sprint de varios de ellos. La recogida de datos se llevó a cabo durante la temporada 2018/2019 en partidos oficiales de LaLiga 123.
El trabajo es resultado de una de las líneas de investigación que llevan a cabo investigadores del grupo HUM-628, D. José María Oliva y Dr. José María Muyor, sobre la monitorización de las demandas físicas en deportistas profesionales. Además, esta investigación cuenta con la colaboración de profesionales de la preparación física como Víctor Fortes y el investigador con mayor número de estudios publicados en fútbol dentro del área de Ciencias del Deporte, Dr. Peter Krustrup.
Los deportistas fueron monitorizados con el dispositivo WIMU Pro (desarrollado por la empresa almeriense RealTrackSystems) con el fin de recoger datos de cada aceleración y sprint. La capacidad de aceleración y sprint de los jugadores de fútbol es fundamental para su rendimiento porque se consideran como las acciones más determinantes del juego. Por ejemplo, los sprints son las acciones más frecuentes para marcar un gol y las aceleraciones/desaceleraciones de alta intensidad se consideran acciones que aumentan la carga mecánica y el daño muscular post-partido.
Por tanto, este estudio ha proporcionado información a los especialistas de la preparación física acerca de cuáles son las demandas promedio de la competición en variables del perfil de aceleración y sprint para que éstos diseñen tareas específicas de entrenamiento que preparen al jugador para dichas demandas.
A modo de ejemplo: si las acciones de sprint se realizan con una velocidad inicial promedio de 5-6 km/h en los partidos, se recomienda que los preparadores físicos diseñen tareas para entrenar el sprint en las que los jugadores no arranquen siempre desde parado sino en velocidad, puesto que el objetivo es adaptar al deportista a las demandas de la competición.
Además, el estudio tiene en cuenta la posición de juego, por lo que se recomienda que los especialistas tengan en cuenta esta variable ya que hay diferencias estadísticamente significativas entre las demandas de sprint o aceleración según la posición del jugador en el terreno de juego.
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