Jaén /
26 de octubre de 2020

El desinfectante que lucha contra las bacterias del futuro

Fotografía ilustrativa de la noticia

Autoría: Remedios Valseca / Fundación Descubre

Un equipo de investigación de la Universidad de Jaén ha patentado un compuesto que elimina microorganismos patógenos en cualquier tipo de utensilio y evita que evolucionen y creen resistencia. De esta manera, no solo se acaba con las infecciones en tiempo real, sino que previene el desarrollo de cepas más agresivas en un futuro. Además, la nueva fórmula no contiene agentes que dañen al medio ambiente.

Bacterias y virus campan a sus anchas por todos lados. Desde Fleming hasta la actualidad ha existido un incesante número de inventores con nuevas fórmulas que los erradican pero, aún así, ahí siguen. Incluso, surgen nuevos microorganismos (como ese del que todos hablan) y los ya conocidos, se hacen más fuertes.

Biopelícula de la mezcla de bacterias tratadas. Izquierda (control, células vivas), centro (tratamiento durante 5 minutos, gran cantidad de células muertas) y derecha (tratamiento durante 10 minutos, totalidad de células muertas).

Pero, ¿por qué ocurre esto? ¿Por qué atacan con mayor ferocidad a pesar de que se combaten con armas cada vez más poderosas? La razón se encuentra en que su ADN responde ante estos ataques. Modifican sus genes para que las herramientas humanas no les afecten. Ahí es donde incide un nuevo desinfectante creado por un equipo de la Universidad de Jaén: no sólo acaba con ellas, sino que evita que adquieran resistencia en el futuro.

En el caso de las bacterias, no suelen encontrarse solas y aisladas, sino que se unen como un ejército entre ellas y se adhieren a cualquier superficie. Son los denominados biofilms. Los microorganismos excretan una matriz extracelular que les sirve de cimiento y como medio para compartir recursos. Es aquí, en este soporte, donde se produce el rechazo a los compuestos que les pueden afectar y donde resisten ante un nuevo ataque similar.

En investigaciones realizadas por los expertos, detectaron bacterias de origen alimentario que habían adquirido mecanismos de resistencia, modificando sus genes por mutación y adquiriendo nuevos que se incluían en su ADN, aumentando así el reservorio de resistencia a ciertos compuestos. Llegaron a localizar hasta 14 genes que propician esa oposición a agentes antimicrobianos de uso frecuente en terapia y en procesos de desinfección. “Ahí es donde la nueva generación de desinfectantes debe incidir”, pensaron.

A partir de este planteamiento, han patentado una nueva fórmula desinfectante que no sólo elimina a las bacterias patógenas, sino que también acaba con su capacidad de evolucionar genéticamente y adquirir resistencia ante agentes antimicrobianos. La composición utiliza agentes sostenibles, que se degradan fácilmente en el ambiente sin dañarlo.

Este compuesto, patentado con el nombre ‘Composición desinfectante’ resuelve la alta toxicidad de los desinfectantes usuales y la capacidad de los microorganismos de volverse resistentes a ellos. “Por un lado, productos como la lejía, pueden provocar efectos adversos en los seres vivos tras una alta exposición, lo que la convierte en un producto altamente contaminante. Por otro lado, el nuevo bactericida inhibe las denominadas bombas de eflujo, un mecanismo inespecífico por el que los microbios expulsan los desinfectantes y antibióticossin que actúen sobre su diana y favorece el desarrollo de resistencia a ellos”, indica a la Fundación Descubre la investigadora de la Universidad de Jaén Hikmate Abriouel, inventora de la solución.

Los inventores del desinfectante Nabil Benomar, Hikmate Abriouel y Leyre Lavilla.

Los expertos han confirmado que el desinfectante elimina por completo diversas cepas bacterianas patógenas comunes en el ámbito alimentario y sanitario con tan solo cinco minutos de exposición. Además, han demostrado tras repetidas aplicaciones que no crean resistencia como sí ocurre con otros biocidas confirmando su eficiencia en las bacterias más frecuentes y nocivas en la actualidad como Listeria monocytogenes, que provoca listeriosis, Salmonella Enteritidis, culpable de la salmonelosis, entre muchas otras, y Escherichia coli. “La eliminación de Bacillus cereus, que provoca trastornos intestinales, ha sido siempre un reto para la industria alimentaria debido a la resistencia de sus esporas, tanto a tratamientos físicos como químicos”, concluye la investigadora.

Esta misma respuesta de rechazo la producen los microorganismos en el ser humano al exponerse a antimicrobianos. Así, los inventores indican que este nuevo compuesto podría hacer que los antibióticos recuperen su eficacia terapéutica en el tratamiento de infecciones graves causadas por ciertas bacterias resistentes a algunos medicamentos utilizados en la actualidad.

En estos tiempos, en los que la desinfección de superficies y utensilios es objetivo primordial, las bacterias se están cargando de resistencia a la que, en algún momento, habrá que enfrentarse. Los productos que ahora se usan no serán válidos cuando sus descendientes lleguen con el escudo anti-desinfectante puesto. Será muy útil contar con aliados como este nuevo compuesto para luchar contra estos microorganismos, ahora y en el futuro. La fórmula ya se encuentra disponible para ser aplicada por empresas que quieran explotar el producto.

Más información en #CienciaDirecta: Patentan un nuevo desinfectante que evita la diseminación de bacterias multirresistentes

Versión en inglés: Patented a new disinfectant that prevents the spread of multi-resistant bacteria


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