Córdoba /
07 de febrero de 2019

Siguiendo los pasos del virus que anda

Fotografía ilustrativa de la noticia

Fuente: Remedios Valseca / Fundación Descubre

Investigadores de la Universidad de Córdoba han elaborado un modelo estadístico que muestra la probabilidad de que el microorganismo responsable de la gastroenteritis persista en la cadena alimenticia. Además, detecta hábitos en la manipulación de alimentos frescos que pueden evitar su contagio hasta en un 60%, como el lavado de manos frecuente.

En ocasiones, tras haber sufrido dolor de estómago, vómitos y diarreas, el médico de familia diagnostica que un virus resulta el causante del malestar que está afectando a la población de manera masiva. Ese virus que anda, a gran velocidad además, se llama norovirus y suele esconderse en frutas y verduras frescas y se transmite a través de cualquier superficie o elemento que toque, incluidas las manos.

Los síntomas de la infección por norovirus son dolor de estómago, vómitos, diarrea, dolor muscular y fiebre ligera.

Investigadores de la Universidad de Córdoba, de la Universidad Estatal de Kansas, la Universidad de Idaho y la empresa Ewen Todd Consulting de Michigan se han tomado en serio la evaluación de riesgo de este virus. De esta forma, han desarrollado un modelo matemático que analiza y evalúa su recorrido desde las verduras hasta los platos tras la observación en comedores escolares de Kansas. Una vez datado todo el itinerario del norovirus, los expertos indican que simplemente con una limpieza y desinfección de superficies y de las manos del manipulador con más frecuencia de la habitual, el organismo puede eliminarse.

Los resultados del estudio publicado en la revista International Journal of Food Microbiology apuntan a que existe un desconocimiento generalizado sobre el comportamiento de este microorganismo, lo que plantea la necesidad de una formación dirigida a los actores de la cadena alimentaria. “Aunque el 60% de la transmisión del virus se produce en restaurantes, los comedores escolares pueden presentar mayor riesgo, ya que la población infantil suele responder con peor pronóstico ante la gastroenteritis”, indica a la Fundación Descubre el investigador de la Universidad de Córdoba Fernando Pérez, autor del artículo.

El 60% de la transmisión del virus se produce en restaurantes pero los comedores escolares presentan mayor riesgo ya que la población infantil suele responder con peor pronóstico ante la gastroenteritis.

Además, el grupo de investigación HIBRO de la Universidad de Córdoba, ha sumado un módulo en el software de su propiedad, de acceso público y gratuito llamado Microhibro, que incluye la opción de introducir las prácticas y procesos habituales en la cocina para obtener el riesgo probable de que el virus permanezca. De esta manera, cualquier empresa de restauración o industria agroalimentaria podrá conocer el peligro de ser portadora del peligro en sus locales.

Investigadores del grupo HIBRO de la Universidad de Córdoba autores del estudio.

A partir de este momento, los expertos quieren trasladar el mismo modelo al estudio de bacterias frecuentes en la cadena alimenticia como Escherichia coli o Salmonella spp.

 

Referencias:

Fernando Pérez Rodríguez, Junehee Kwon, Araceli Bolívar, Kevin Sauer, Dojin Ryu y EwenTodd. ‘Probabilistic risk model of norovirus transmission during handling and preparation of fresh produce in school foodservice operations’. International Journal of Food Microbiology. 2018

Más información:

FUNDACIÓN DESCUBRE

Departamento de Comunicación

Teléfono: 954239422

e-mail: comunicacion@fundaciondescubre.es

 


Ir al contenido