Huelva /
29 de marzo de 2021

¿Cómo era el puerto desde el que partió Cristóbal Colón en 1492?

Fotografía ilustrativa de la noticia

Autoría: Alba Madero / Fundación Descubre

Un equipo de investigación de la Universidad de Huelva ha reproducido la evolución de la ensenada onubense de Palos de la Frontera a lo largo de seis millones de años mediante un análisis geológico y químico de los sedimentos presentes en el terreno, los tipos de fósiles que éstos contienen y el establecimiento de su edad. Así, los investigadores detallan cómo era la zona en la que comenzó la expedición colombina.

Muchos de los grandes descubrimientos de la historia de la humanidad comienzan con un viaje. Los detalles de cómo sucedieron, sin embargo, quedan relegados a las crónicas de la época o incluso se pierden en la bruma del tiempo. Es el caso de los interrogantes que siguen rodeando el viaje que llevó a tierras americanas a Cristóbal Colón. Los orígenes del explorador o los detalles de su primer viaje no son una excepción a esta regla, aunque ya hay investigaciones andaluzas centradas en resolver la primera incógnita.

Maqueta a escala con las tres carabelas.

Para resolver el segundo interrogante, la ciencia se encarga de recuperar la memoria perdida y reproducir el escenario desde el que partió la expedición colombina. ¿Cómo era en 1492 el puerto onubense de Palos de la Frontera? Un equipo multidisciplinar de la Universidad de Huelva, ofrecen algunos detalles. Por ejemplo, que la deforestación y la sedimentación motivada por la lluvia provocaron que la ensenada desde la que partió el Almirante en 1492 tuviera unas condiciones muy pobres de navegación. O que el puerto en el que aprovisionó sus barcos necesitó que se extrajera barro de modo que la dársena mantuviera la profundidad necesaria para que éstos atracaran. En aquella época, el agua que cubría la ensenada alcanzaba entre tres y cuatro metros. Por otro lado, La Pinta y La Niña tenían un calado sin carga de casi dos metros, motivo por el podían entrar en el puerto de Palos de la Frontera.

Este viaje histórico recupera sus inicios y detalles como éstos con el trabajo de un equipo de investigación de la Universidad de Huelva, que ha recreado por primera vez el puerto de Palos de la Frontera del que partió Colón en 1492 hacia América. Mediante un análisis geológico y químico, los investigadores se remontan seis millones de años para comprobar los cambios que ha sufrido el terreno hasta la actualidad. Así, reproducen cómo era la dársena en el momento de la partida de la expedición colombina y predicen futuras variaciones del terreno en esta área y otras con características geológicas similares.

Estado actual de la ensenada, donde se observa la vaguada con restos arqueológicos.

Tras establecer una cronología, los expertos realizan por primera vez en esta ensenada un análisis paleoambiental, es decir, la recreación del ambiente geológico de la zona, para estimar su evolución. Para ello estudiaron la composición química y procedencia de sedimentos, fósiles y vegetación, entre otras muestras. Con todos estos datos, además, han reproducido a escala este puerto.

Cronología

Los expertos explican que hace seis millones de años, durante el periodo geológico denominado Mioceno, el área de la Depresión del Guadalquivir era muy distinta a como es en la actualidad. Se trataba de una zona de paso entre el Atlántico y el Mediterráneo, como lo es ahora el Estrecho de Gibraltar. Más adelante, este estrecho se cerró y se formó una amplia bahía, que ocupaba el sur de las provincias de Huelva, Sevilla, Córdoba y la parte norte de Cádiz. Esta formación geológica sufrió numerosas tormentas que erosionaron los fondos marinos, formando acumulaciones de fósiles hace cinco millones de años en zonas como las localidades onubenses de Bonares, Lucena del Puerto o Moguer.

Posteriormente, durante el Pleistoceno, hace 2 millones de años, se produce otra gran dinámica fluvial que erosiona gran parte de los sedimentos marinos formados durante las épocas anteriores. A causa de este arrastre de tierra, se configuran las ensenadas y bahías de la zona, como la de Palos de la Frontera. En los centenares de miles de años sucesivos, estos accidentes geográficos se ‘rellenan’ con sedimentos y vegetación transportados por las corrientes de agua.

Francisco Ruíz Muñoz, co-autor del estudio.

Hace 20.000 años, durante el Mesolítico, se desarrolló el último periodo glacial. En aquella época el nivel del mar se situaba a 120 metros debajo del actual. A partir de entonces se produce un deshielo progresivo y el océano comenzó a elevarse, por lo que hace 6.500 años inundó la ensenada colombina hasta que ésta alcanzó una profundidad de 8 a 9 metros. Desde ese momento, esta formación geológica acumuló sedimentos, tierra y rocas a causa de las lluvias y, debido a las dinámicas fluviales, comenzó el proceso de deforestación que provocó la cobertura de sedimentos y vegetación en los márgenes del canal.

Desde entonces y hasta 1492 el nivel del agua de la ensenada desciende progresivamente hasta situarse en los 3 ó 4 metros de profundidad en la época colombina. Posteriormente, debido a la acumulación de estos sedimentos y la consecuente dificultad para continuar su empleo como puerto, éste perdió actividad progresivamente hasta su abandono. Debido a estas dinámicas del terreno, queda poco del puerto desde el que partió Colón.

Este equipo de investigadores conserva la memoria del primer viaje hacia América y aporta más detalles sobre cómo ocurrió. En la actualidad, la tecnología facilita nuevos datos científicos que ayudan a investigadores como los de la Universidad de Huelva a contribuir a la reconstrucción de hitos históricos desde un punto de vista diferente. De este modo, inspiran para imaginar, e incluso saber con certeza, cómo será el terreno sobre el que se asiente en el futuro.

Maqueta de Palos de la Frontera con la ensenada desde la que partió Cristobal Colón en 1942.

Más información en #CienciaDirecta: Recrean por primera vez el puerto desde el que partió Cristóbal Colón hacia América


Ir al contenido